· Joseph Adam Jonas ·
Pero entonces lei en alguna parte que "El amor no es encontrar a la persona perfecta, sino ver de manera perfecta a alguien imperfecto"; y eso es lo que me sucede contigo.. Amo cada imperfeccion tuya, tanto que se ven perfectas a mis ojos y no puedo diferenciarlas. Tus pelos alborotados, tu sonrisa, tu risa, tus ojos, tu mirada, tu voz.. como alguien podria considerar alguna de esas cosas un defecto? Tal vez alguien lo haga, pero yo no, solo por el hecho de que te amo tal y como eres y no quiero que cambies jamas.
Te amo Joseph Adam Jonas Miller ♥
viernes, 31 de diciembre de 2010
Adiós.
Sin embargo, siento que algo cambio.. La distancia que me propuse mantener de ti, la imposicion de no leer acerca de tu vida, ni de lo que haces en estos dias, finalmente hacen mella en mi..
Es verdad, aun se eriza mi piel cuando te veo, e inculso no puedo evitar sonreir..
Pero ya no se embotan mis sentidos cuando hablas, no se estremece mi cuerpo cuando ries, y sobre todo, ya no tiembla, ya no se ahoga mi corazon con la armoniosa melodia de tu voz..
Asi que creo que esto es el adios, al menos por el momento, mientras me he librado del hechizo doloroso que fue amarte sin distancia y sin razon.
sábado, 13 de noviembre de 2010
Pero ahora, tengo la oportunidad de revivirlos, de mejorarlos, de volverte a ver, de una manera mas cercana y real. SE que esta noche sera inolvidable, y aunque los pequeños detalles se desvanescan, el espectro de esta noche perdurara mientras mi memoria perdure.
lunes, 16 de agosto de 2010
-Joseph, debemos irnos- mi hermano ingresó en la habitación con un traje negro y me tomó del hombro, reconfortándome –Debes ser fuerte- musitó.
-No puedo Nicholas. Todo esto es mi culpa y nadie, jamás, podría negarlo…- susurré y tal como esperaba, el no pudo contestar a aquello.
-Te esperaré abajo- indicó luego de un rato y salió de la habitación. Coloqué la foto nuevamente sobre mi mesa de noche y finalmente me di la vuelta y salí apagando la luz a mis espaldas.
“Te amo mas que a nada en la vida ¿lo sabes?”; su voz resonó en mi mente una vez mas y me inundó una oleada de profundo dolor. Claro que lo sabía; ahora si, y era demasiado tarde.
Mis ojos me escocían y reparé en que estaba mirando sin ver por la ventanilla, sin parpadear y con el rostro totalmente inexpresivo. Parpadeé repetidamente pero no me moví ni aparté la vista.
“No me faltes nunca, por favor. Mi vida ya no tendría sentido si te vas” y la mía tampoco Cielo, ahora lo sé.
-Llegamos- anunció mi madre y asentí levemente. Esperé a que los demás bajaran e inspiré profundamente.
Caminé casi inconscientemente al interior de aquel lugar. Sabía que cada persona en aquel lugar me observaba y murmuraba a mis espaldas pero no podía culparlos, el único culpable aquí era yo…
“-No se como decirte esto…- musité nerviosamente.
-¿Vas a dejarme?- inquirió sin expresión alguna en su rostro.
-No, solo... necesito algún tiempo para pensar, acomodar mis prioridades…-
-Vas a dejarme- asintió con tristeza y suspiró. Supuse que gritaría, lloraría, suplicaría o incluso me golpearía, pero esto era incluso peor, parecía no importarle en absoluto y algo en mi interior se arrepintió de lo que había dicho. -¿Puedo preguntar el por qué?- inquirió entonces -¿Hay otra? ¿o acaso ya no me amas?-.
-No hay nadie mas pero… estoy confundido- admití –Solo dame algún tiempo.-
Sin decir nada, se volteó y se alejó sin volver la vista atrás ni una vez.”
Me acerqué con piernas temblorosas y entonces la ví allí, su rostro pálido pero no menos hermoso, desprovisto de vida y de color, sus ojos cerrados en un descanso eterno dentro de aquel cajón. La ví allí, con su vestido favorito perfectamente acomodado, y mi mundo se desmoronó. Mas que cuando ingresé en el cuarto y la hallé cubierta de sangre. Mas que cuando los médicos dijeron que no había nada que pudieran hacer por ella ya. Ella se había ido para siempre. Se había ido y no podría volver.
Sentí mis piernas débiles y caí de rodillas. Enterré mi rostro en mis manos, mientras fuertes espasmos me sacudían e intentaba calmarme en vano.
-Joseph, por favor, levántate. Será mejor que salgas de aquí- susurró alguien en mi oído y me ayudó a levantarme.
Me deje guiar como un zombie y pronto estaba sentado bajo la sombra de un árbol, acompañado de mi hermano mayor.
-Se lo que piensas, pero no es tu culpa Joseph- intentó consolarme Kevin.
-Claro que es mi culpa, todos aquí lo saben- casi grité, dejando entrever parte de la rabia que sentía hacia mi mismo –Jamás debí dejarla…-.
-Tu no sabias, no podrías haberlo sabido-
-¿Qué se suicidaría? Claro que no lo sabía! Pero eso no me hace menos culpable- nada podía aplacar mi dolor –Por un tonto capricho mío perdí a la única mujer que realmente amé, pero me di cuenta demasiado tarde y ahora ya no volverá ¿Sabes? Se ha ido para siempre- que acertada era esa frase alguna vez dicha: Nunca sabes lo que tienes…
-Lo siento hermano. Veo que nada que pueda decir o hacer te hará sentir mejor- se lamentó.
-Nadie puede ayudarme- concordé –Así que, por favor, déjame solo- pedí y sin decir nada, se alejó.
El sol brillaba en lo alto y me sentí totalmente desorientado y fuera de lugar; impotente. No había sombras en las que ocultarse, en las que refugiarse de aquel dolor. Dirigí una ultima mirada a aquel lugar y decidí que no podría soportar volver a entrar allí. Sin que nadie me viera me alejé de allí.
Merodeé por las calles, recorriendo cada rincón que habíamos compartido juntos; la gente no me miraba dos veces al pasar por su lado, mi rostro lo decía todo. Llegué a mi casa y me encerré en mi cuarto. Me contemplé en el espejo pero el rostro que me observaba al otro lado no era el mío: aquel rostro demacrado y transfigurado de dolor no era el mío. Debía ponerle un fin a esto. No escribiría una nota, no me despediría; no tenia las fuerzas necesarias. Ellos lo entenderían. O no. Pero sabrían mis razones.
-Si pudieras perdonarme Cielo, me gustaría pasar el resto de la eternidad contigo… de lo contrario, que me consuman las llamas del infierno, pues no puedo vivir en un mundo en que ya no estas. Te amo Cielo, ahora y siempre- murmuré aquellas palabras y todo acabó.
Ni siquiera sentí el filo del frío metal atravesando mi piel; el dolor que me rasgaba desde dentro era aun peor que la peor de las torturas. Ví correr la sangre sin interrupción y lentamente me fui desvaneciendo, fui absorbido por la mas impenetrable oscuridad… Pero en medio de la oscuridad surgió una luz, su luz, y supe que me había perdonado y que estaríamos juntos, el resto de la eternidad.
domingo, 15 de agosto de 2010
Gracias Denisse y Paul, les deseo el mejor de los aniversarios ♥
Y a vos Joseph, gracias por desvelarme cada noche desde el momento en que te conoci.. No cambies esa personalidad infantil y divertida que te caracteriza, no importa cuantos años cumplas. Te amo y te amaré siempre así como sos.. Feliz Cumpleaños Joe ♥
domingo, 8 de agosto de 2010
martes, 13 de julio de 2010
sábado, 29 de mayo de 2010
lunes, 24 de mayo de 2010
Encontrarte en cada canción
amarte de esta manera
viernes, 21 de mayo de 2010
Un año ha pasado desde que te tuve tan cerca como no quizás no vuelva a tenerte.
Un año ha pasado desde el momento en que mi corazón empezó a latir por ti de forma diferente; desde que dejaste de ser una simple estrella a la que admiraba para convertirte en la persona que amo y que me desvela cada noche.
Porque creo que fue en ese momento, cuando respiramos el mismo aire y compartimos el mismo cielo, cuando en vez de separarnos miles de kilometros solo nos separaban unos cientos de metros y mi ingenua mente imaginó que no serias tan imposible, que sería facil amarte y que no sufriría como lo hago por ti..
Fue en ese momento cuando te robaste mi aliento y te llevaste mi corazón, tan lejos que no lo puedo recuperar.
Un año ha pasado desde que comencé a amarte de esta manera desgarradora y desmedida.
domingo, 9 de mayo de 2010
una canción sin otra melodia
que la de los lastimeros latidos de mi corazón
Hoy escribo
no para decirte cuanto te amo
que es mas alla de lo cuerdo y sensato
Ni para contarte como son mis dias
mis dias sin ti a mi lado
tan vacios y desolados
Hoy escribo para decirte adios
que aunque no crea ni una de estas palabras
hoy quiero dejarte ir y
dar mi amor a alguien mas..
Hoy escribo para dejar de llorar,
para sentir que tengo el control
y que puedo vivir sin este amor
Porque ya no puedo mas
ya no puedo respirar
y el agujero en mi pecho
crece cada dia mas
junto con mi necesidad de tí,
de oirte decir que me amas
Hoy escribo para decirte adios
que aunque no crea ni una de estas palabras
hoy quiero dejarte ir y
dar mi amor a alguien mas..
domingo, 2 de mayo de 2010
miércoles, 28 de abril de 2010
viernes, 23 de abril de 2010
lunes, 5 de abril de 2010
viernes, 2 de abril de 2010
sábado, 13 de marzo de 2010
sábado, 6 de marzo de 2010
viernes, 5 de marzo de 2010
Me dirigí a mi habitación recién bañada, con una toalla alrededor de mi cuerpo, sobre mi ropa interior. Me paré de espaldas a la cama, frente al ropero con sus puertas abiertas de par en par y me crucé de brazos, meditando que ropa me pondría.
De repente sentí unas manos en mi cintura y unos calidos labios que besaban uno de mis hombros y luego comenzaban a subir por mi cuello.
-¿Qué haces aquí?- pregunte algo sorprendida, sin voltearme aún.
-Supe que estabas sola y quise venir a pasar algo de tiempo contigo- musitó su seductora voz en mi oído y luego mordió delicadamente el lóbulo de mi oreja.
Me volteé para mirarlo y, sin mas preámbulos, comenzar a besarlo con pasión, haciendo que mis dedos se enredaran en su alborotado cabello. Sus manos continuaron en mi cintura, comenzando a aplicar lentas caricias en la zona y las mías bajaron desde su cuello por su pecho, acariciándolo en profundidad, hasta llegar al comienzo de su remera. La quité de una sola vez, para luego dejar vagar mis labios por todo su torso, deteniéndose en cada uno de sus perfectos lunares.
Mis labios buscaron a los suyos para volverlos a besar con desenfreno y comenzamos a desplazarnos lentamente hacia atrás, hasta que sus piernas se toparon con el inicio de la cama y ambos caímos sobre ella.
-¿Sabes que esto esta mal, no?- murmuré agitada separándome apenas unos milímetros de sus labios.
-Lo se- sonrío volviéndome a besar y con un rápido movimiento me dejó debajo de él. Recorrió mi figura, aun cubierta por la insulsa toalla, con sus manos y delineó mis facciones para luego agregar en un susurro sensual: -Prohibido.-
El agarre de la toalla se soltó al momento que sentía sus labios descendiendo por la loma de mis pechos y un suave gemido escapó de mis labios. Sus besos subieron hasta mi cuello y bajaron por todo mi torso hasta mi vientre, haciéndome enloquecer, para luego volver a mis labios nuevamente y besarlos con ardor.
Volví a quedar sobre él y comencé a besar todo su torso desnudo, bajando lentamente e hincando suavemente mis dientes en su tersa piel de tanto en tanto, hasta llegar al broche de su cinturón. Me detuve en esa zona un instante y escuche gozosa como no pudo contener un gemido de placer. Desabroché su cinturón con parsimonia e hice lo propio con el botón y la cremallera de su pantalón. Volví a mirarlo; tenia el cuello echado hacia atrás y los ojos cerrados, y sonreí victoriosa. Quité su pantalón de escena, procurando acariciar al completo sus trabajadas piernas.
-¿Sabes lo que sucedería si Dylan o Emily se enteraran, no?- volví a preguntar, depositando sensuales besos que iban subiendo por su pecho, entre palabra y palabra.
-No tienen por qué enterarse- musitó audaz, recorriendo mi cuerpo con sus calidas manos, y atrayendo mi rostro al suyo para poder besarme. Sentí sus manos en mi espalda, y luego como la presión del sostén desaparecía para pasar a formar parte de la decoración de la habitación.
-Claro que no- exhalé cuando en un rápido movimiento me dejó nuevamente debajo de él. Comenzó con una línea de besos por mi cuello, pasando por mis clavículas y hombros hacia la loma de mis pechos. Sus manos acariciaron mis muslos, mis glúteos y continuaron ascendiendo por mi espalda y vientre hasta llegar a mis pechos, los cuales hizo suyos provocando que un agudo gemido escapara de mis labios y las uñas de una de mis manos se enterraran en su trabajada espalda mientras la otra mano se encargaba de arrugar las sabanas.
-Si sientes culpa… podemos detenernos- sugirió mientras sus labios se posaban en la zona mas sensible de mis pechos y sus manos se deslizaban lentamente hacia la única prenda que me cubría.
-Sabes que eso no es lo que deseo.-
-¿Y qué es lo que deseas?- susurró sobre mis labios; podía sentir su calido aliento entrecortado sobre mí.
-A ti- contesté agitada y bese sus labios mientras las ultimas prendas que nos cubrían eran apartadas y lo sentía en mi; entregándonos juntos al placer de lo que sabíamos no era correcto, de lo prohibido.
domingo, 21 de febrero de 2010
martes, 16 de febrero de 2010
sábado, 6 de febrero de 2010
jueves, 28 de enero de 2010
viernes, 25 de diciembre de 2009
domingo, 20 de diciembre de 2009
domingo, 13 de diciembre de 2009
Un mundo de oportunidades;
Puertas Abiertas..
El mayor anhelo de tu corazón;
Esperanza..
El escenario de los sucesos mas insólitos;
Felicidad, Alegría..
El límite de tu imaginación;
Libertad, Ilusiones..
Un espacio compartido entre dos;
Amor..
La oportunidad que brinda mi subconciente, mi imaginación, de cumplir el mayor anhelo de mi corazón; de estar a tu lado, aunque sea en las situaciones mas insólitas y amarte sin limites, Ilusionandome con que me amas de la misma manera ♥
O lo que es aun peor, despertar sin saber nada de lo que ocurrio en mi mente mientras dormia; sin saber si he soñado contigo, o siquiera si he soñado..
Desearía tener el poder de recordar, reproducir y memorizar cada milesima de segundo que compartimos, poder detallar perfectamente cada uno de mis sueños, el unico lugar donde realmente podemos se Tu y Yo.. ♥
jueves, 10 de diciembre de 2009
domingo, 29 de noviembre de 2009
viernes, 27 de noviembre de 2009
sábado, 21 de noviembre de 2009
Seis meses han pasado desde que te tuve tan cerca; desde que pude oirte cantar y, aunque lejos, compartimos el mismo espacio, el mismo aire y vimos el mismo cielo. Seis meses han pasado desde que pude sentirte a mi lado, a pesar de las otras miles de personas que alli se encontraban. Seis meses desde que estuve tan cerca de cumplir mi mayor sueño como nunca lo he estado.